85 millones de euros. Es el dinero que destinaron conjuntamente Eroski y Uvesco el año pasado a descuentos, promociones y otro tipo de fórmulas de ahorro para ajustar al máximo la cesta de la compra. El aumento de la competencia y los cambios en los hábitos de consumo por la inflación, con una compra mucho más diversificada por cadenas, obligan a redoblar esfuerzos en la pelea por el precio.
Las dos principales cadenas vascas de distribución tienen distintos objetivos geográficos a la hora de crecer, pero todo pasa primero por retener la posición que ya controlan en Euskadi, su mercado principal. Ese dominio hace que sea complicado el poder elevar las cuotas actuales pero a la vez reporta una parte del negocio indispensable en el balance global.
Eroski factura ya cerca de 6.000 millones de euros, de los que alrededor de un tercio se consiguen en Euskadi. No es el mercado que más crece en porcentaje para la cooperativa del Grupo Mondragon, que tiene en los últimos años a Galicia y Baleares como zonas fetiche, aunque si el más abultado por volumen y en ese contexto mantener la trayectoria al alza de las ventas ya es un triunfo.
La propia Rosa Carabel, CEO del grupo de distribución, apuntaba en la última presentación de resultados que hay margen todavía para avanzar en los mercados que ya se lideran o colideran, caso además de Euskadi de las mencionadas Baleares y Galicia, aunque el foco se pondrá ahora sobre todo en territorios próximos con cuotas aun menores como Cantabria, La Rioja o Aragón.
El lehendakari, Imanol Pradales, y Rosa Carabel, CEO de Eroski
Un periodo convulso
Los últimos años han sido especialmente convulsos para la distribución, con una pandemia que dio un revolcón a los hábitos de consumo enlazada con un periodo de altísima inflación que aun se arrastra en los precios.
Y puede decirse que tanto Eroski como Uvesco salen reforzadas de este último lustro tan movido, al menos en lo referente a la evolución del negocio en Euskadi. Antes de 2020 Eroski reportaba una cuota incluso inferior al 30% y el último dato ofrecido por Carabel de cierre del pasado ejercicio era de prácticamente el 36%.
Una tienda de BM, del grupo Uvesco
En cuanto a Uvesco, la sociedad de Supermercados BM está ahora en torno al 18%, un punto por encima del dato que manejaba en Euskadi en 2018.
Imagen de pescadería de Mercadona.
Crecen Mercadona o Lidl
Puede decirse por tanto que no ha habido cambios sustanciales en el reparto del negocio vasco entre las principales cadenas de distribución, con ambas firmas de raíces vascas liderando el sector con mucha diferencia respecto a Mercadona, a la que la revista especializada InfoRetail concede ya el 9,5% del suelo comercial en el País Vasco (número de metros cuadrados, lo que no tiene por qué coincidir con ventas).
La entrada de la cadena de Juan Roig ha supuesto otra de las grandes sacudidas en el mercado vasco en los últimos años y, aunque el avance es evidente, todavía no ha supuesto un mordisco preocupante en el negocio de Eroski y BM.
Establecimiento de Lidl en Berango /LIDl - Europa Press
También es destacable el rápido crecimiento de las alemanas Aldi y Lidl, de hecho esta última, según el ranking que elabora esta publicación, ya habría rebasado por superficie a Carrefour o Dia y con una treintena de tiendas (número muy similar al de Mercadona aunque son establecimientos de menor tamaño) superaría ya el 6% del mercado.